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Delfín se Mantiene, Emelec Afuera

Parece increíble, pero es el equipo ecuatoriano novato el que mantiene una esperanza des seguir con vida en esta Copa Libertadores que ha sido en general poco favorable para los conjuntos del país.

15 de mayo

Delfín 1 (Chicaiza 19’) – Atlético Nacional 0
Manta – Estadio Jocay

El arranque del juego de los manabitas fue vertiginoso, de tal manera que fueron arrinconando a la visita con el pasar de los minutos y se veía caer la primera anotación, lo que aconteció con un remate al borde del área de Andrés Chicaiza (19 min.) tras gran pared con Garcés. El dominio del cetáceo fue disminuyendo tras varios minutos después del gol y pasada la media hora los colombianos habían tomado mayormente el dominio de la pelota, aunque no necesariamente se acercaron al pórtico de Ortiz. Al final del primer tiempo la sensación era que el conjunto ecuatoriano hacía bien las cosas.

Para el inicio del segundo tiempo el elenco paisa se apoderó decididamente de las acciones. La visita fue haciendo un par de cambios en su oncena para mejorar la calidad de sus ataques y si bien eran protagonistas del juego, sus incursiones no contenían todo el peligro que necesitaban, pues la zaga manabita estaba bastante ordenada, aunque el local apenas si podía hacerse notar con contragolpes. Al acercarse el final del encuentro el juego del equipo colombiano se volvía más peligroso, mas no le alcanzó para la igualdad.

Delfín se juega la clasificación a octavos de final en La Paz frente a Bolívar el 24 de mayo desde las 19:30 ecuatorianas.

DEL: Pedro Ortiz; Pedro Perlaza (TA 44’), Henry Cangá, Roberto Luzarraga, Silvio Gutiérrez; Luis Luna, Bruno Piñatares (TA 68’); Henry Patta (TA 50’) (Francisco Mera 65’), Andrés Chicaiza (Cristian Romero 92+’), José Arismendi (TA 74’) (Jesi Godoy 75’); Carlos Garcés
Goles: Chicaiza 19’
ATN: Fernando Monetti; Juan C. Zúñiga (Helibelton Palacios 45’), Daniel Bocanegra, Diego Braghieri, Rafael Delgado; Raúl Loaiza, Gonzalo Castellani (TA 55’) (Reinaldo Lenis 71’); Jeison Lucmuí, Aldo Leao Ramírez, Gustavo Torres; Andrés Rentería (Vladimir Hernández 54’)

16 de mayo

Flamengo 2 (Everton Ribeiro 47’, 92+’) – Emelec 0
Río de Janeiro – Maracanã

Los azules sorprendieron con presión y buen toque al local, sobresaliendo de esta manera en los minutos iniciales. Flamengo fue retrocediendo algunos metros y cedió la iniciativa a su rival para armar contragolpes que lucían peligrosos y progresivamente fue causando estragos en el área del bombillo. Pasada la media hora el conjunto carioca ya había pasado a dominar el juego, aunque el mismo se ponía especialmente cortado en el mediocampo donde el bombillo había puesto mucha gente.

Apenas comenzado el complemento, Everton Ribeiro (47 min.) anotó tras el rebote de una jugada iniciada por derecha. Flamengo fue copando los espacios de la cancha y aprovechaba el hecho que Emelec necesitaba anotar, por lo que pronto estuvieron encima del arco ecuatoriano perdiendo algunas oportunidades claras de ampliar el marcador. El bombillo había hecho algunas variantes ofensivas para buscar el empate y los últimos minutos fueron dramáticos siendo jugados de área a área, tensión que solo se pudo romper con otro tanto de Everton Ribeiro (92+ min.) ejecutando un gran tiro libre.

Emelec quedó eliminado de Copa Libertadores y jugará una opción remota de disputar Copa Sudamericana el 23 de mayo en Guayaquil frente a Santa Fe desde las 19:45.

FLA: Diego Alves; Rodinei, Réver, Juan (Léo Duarte 46+’), Renê; Diego (TA 40’) (Jonas 87’), Gustavo Cuéllar, Lucas Paquetá (TA 73’); Everton Ribeiro, Henrique Dourado (Marlos Moreno 82’), Vinicius Jr.
Goles: Ribeiro 47’, 92+’
EME: Esteban Dreer; Juan C. Paredes, Marlon Mejía (TA 90’), Jordan Jaime, Oscar Bagüí; Dixon Arroyo, Osbaldo Lastra (TA63’); Joao J. Rojas (Fernando Luna 52’), Hólger Matamoros (Jéffesron Montero 52’), Ayrton Preciado (TA 33’); Carlos Orejuela

Edison Guapaz Zambrano
Guitarras y gol
flamengo independiente

El Retorno del Rey

Flamengo e Independiente igualaron 1-1 en duelo de vuelta jugado por la final de la Copa Sudamericana 2017 en el Maracaná de Río de Janeiro. Este resultado determinó que el cuadro argentino se proclame campeón de la competición, pues había vencido 2-1 en su casa en el partido de ida.

Con la tensión del ambiente previo con sus buenas y malas consecuencias, el juego comenzó con una intensidad enorme, aunque el club local tenía algo más el balón y en los primeros 15 minutos gestaron algún par de oportunidades notables de gol, en tanto que los Avellaneda elaboraban con buen toque el contraataque. Mientras Flamengo era más vértigo y empuje, Independiente más pausa y elaboración en el juego que no dejaba de ser vistoso.

Mientras el elenco argentino iba desarrollando su juego y volviéndolo a su favor, llegó el gol brasileño cuando Lucas Paquetá (30 min.) pescó un balón en el área chica generado en un tiro libre. Por momentos el tanto animó emocionalmente al mengão que presionó un par de minutos a la visita, pero después se equilibró el trámite y hubo una falta penal que Ezequiel Barco (40 min.) ejecutó para igualdad del rojo. El fin del primer tiempo llegó en medio de la tensión.

Intenso fue el comienzo del segundo tiempo, con un cuadro local que hizo cambios ofensivos para buscar desequilibrar el juego, aunque en mediocampo eran algo erráticos y de eso se aprovechaba la buena elaboración del rojo que llegaba con más prolijidad al arco rival, perdiendo ocasiones inmejorables incluso de ponerse al frente en el marcador. Flamengo generaba varias jugadas de balón detenido normalmente fracasando en su consecución.

En el último cuarto de hora el encuentro adquirió la característica fricción de estas instancias en los torneos sudamericanos. La escuadra carioca comenzó a desesperar y sus elementos creativos no encontraban el camino para vulnerar el área de los de Avellaneda. Independiente prefirió replegar un poco para esperar el pitazo final, jugando a los contragolpes gestados en los pies de Barco y Gigliotti, mientras los atacantes brasileños perdían notoriamente lucidez.

FLA: César; Pará, Réver, Juan (TA 90’), Miguel Trauco (Vinicius Jr. 55’) (TA 77’); Willian Arao, Gustavo Cuéllar (Everton Ribeiro 78’); Lucas Paquetá (Lincoln 85’), Diego, Everton (TA 73’); Felipe Vizeu
Goles: Paquetá 30’
IND: Martín Campaña (TA 79’); Fabricio Bustos (Gastón Silva 86’) , Alan Franco, Fernando Amorebieta, Nicolás Tagliafico; Nicolás Domingo, Diego Rodríguez; Martín Benítez (Lucas Albertengo 34’) (TA 72’), Maximiliano Meza (TA77’) (Juan Sánchez Miño 83’), Ezequiel Barco (TA 87’); Emanuel Gigliotti
Goles: Barco 40’ (P)

Edison Guapaz Zambrano
Guitarras y gol
flu vs ldu

Luce Remontable Para Los Albos

Fluminense derrotó 1-0 a Liga Deportiva Universitaria en duelo de ida disputado por los octavos de final de Copa Sudamericana en el Maracaná de Río de Janeiro.

Un enfrentamiento con su historia. Para el tricolor carioca los juegos con los albos tenían varios amargos recuerdos, todo lo contrario para los ecuatorianos que para ellos tal vez son las instancias más emocionantes de sus vidas. Repetto, fiel a su costumbre, dispuso de un 4-2-3-1, en tanto que Fluminense prefirió un 4-3-3 que incluía al ecuatoriano Orejuela.

El cuadro brasileño rápido tomó posesión del balón y se enfiló hacia el arco universitario. Producto de esta presión llegó el gol de Gustavo Scarpa (6 min.) con tiro libre. Tras el gol parecía que los locales lo pasaban por encima al equipo ecuatoriano, pero prefirieron bajar las revoluciones para eso sí, mantener el control de la pelota y al rival muy lejos de su arco.

Los cariocas mantuvieron el control del juego trasladando con tranquilidad el balón buscando alguna falla en la defensa de Liga que al menos en el último cuarto de cancha se veía más aplomado, aunque las pocas veces que disponía del esférico carecía de fuerza para crear peligro alguno al local. Arribando a la media hora del partido el embate inicial del tricolor no era el mismo y la conducción del juego era más bien desganada.

Cambios para el segundo tiempo. Fluminense puso a Sornoza para una mayor dinámica de juego, en tanto que Liga incluyó a Betancourt por González que no viene atravesando una buena temporada y aquel cambio sin duda revitalizó a los albos. Si bien Liga tenía un mayor volumen de ataque, de todas formas de medio campo hacia a bajo dejaba dudas y pasaba apuros cada vez que perdía la pelota.

Empezó a verse el juego algo más favorable al cuadro ecuatoriano, pues los ataques de Fluminense carecían de completa contundencia y además, había salido del acoso inicial y a elaborar ataques con Julio y Betancourt como protagonistas aunque sin ser firmes para pisar el área. A Fluminense le costó volver a arrebatar el esférico a Liga y cuando lo hizo careció de puntería. Antes del último cuarto de hora del juego, el tricolor carioca comenzaba a sentir algo de desesperación.

En los minutos finales los universitarios prefirieron jugar con la angustia del rival que si bien encerró al club ecuatoriano, no tuvo la certeza ni la paciencia para aumentar el marcador. En algunas aisladas contras Liga estuvo cerca del empate y el partido, que por momentos tuvo fricciones y tensión, finalizó con sabor a poco para el local.

La revancha será el 21 de septiembre en Quito.

FLU: Júlio César; Lucas Ríos,Wesley Frazan (TA 68’) (Marlon Freitas 76’), Nogueira, Marlon; Wendel (TA 52’), Douglas, Jefferson Orejuela (Junior Sornoza 45’); Gustavo Scarpa, Wellington Silva (Robinho 78’); Henrique Dourado (TA 39’)
Goles: Scarpa 6’
LDU: Leonel Nazareno; John Narváez, Lucas Tagliapietra, Horacio Salaberry (TA 68’), Aníbal Chalá; Jefferson Intriago (Fernando Hidalgo 86’), Alex Bolaños, Jonathan González (TA 25’) (Jonathan Betancourt 45’) (TA 54’), Anderson Julio, Edison Vega; Hernán Barcos (Juan L. Anangonó 72’)

Edison Guapaz Zambrano
Guitarras y gol
neymar ouro

Espantando Los Fantasmas del Maracaná

La Medalla de Oro de Brasil en el fútbol olímpico va más allá de sumar el título faltante para “el país del fútbol”. Constituye un exorcismo a los grandes dolores de una historia tan rica y vasta, pero también con enormes decepciones, como todas.

 Brasil tuvo un inicio nada alentador para una afición ansiosa y exigente. Sendos empates sin goles frente a las aparentemente débiles selecciones de Sudáfrica e Irak, causaron la molestia de la torcida, que reprobaba con pifias a su combinado que en su versión absoluta viene pasando los papelones de las últimas Copa América y ni hablar de lo que fue el escalofriante 7-1 en las semifinales del Mundial.

Mientras las decepciones las constituían las eliminaciones en primera fase de Argentina y el último campeón olímpico, México, Brasil recuperaba la confianza derrotando 4-0 a Dinamarca para avanzar a cuartos de final. En dicha instancia, las sorpresas eran Corea del Sur, que finalizó la fase de grupos en primer lugar por encima de Alemania y la Honduras de Jorge Luis Pinto que dejó en el camino a los argentinos.

Cuando Cundía el Pesimismo

Cuando Cundía el Pesimismo

En Brasil se esperaba a su figura. Era sabido que Neymar se “bajó de la Copa América” para dar prioridad al sueño olímpico, pero su figura no venía destacando hasta el juego con Colombia en el que abrió la ruta del triunfo. Con un claro 2-0, la verdeamarela superó a los cafeteros y enrumbaba el camino a la de oro. Del otro lado, Alemania arrasó 4-0 a Portugal y sumado al 10-0 sobre el debutante Fiji, encendía la preocupación en el local. Rondaba al fantasma del 2014. En las otras semifinales, Nigeria con claridad superaba 2-0 a Dinamarca y Honduras daba el golpe derrotando 1-0 a los surcoreanos.

Instalado en el Maracaná, Brasil tenía la obligación de no dejarse sorprender y salió a demoler a su rival. En 15 segundos ya estaba ganando a Honduras con un Neymar muy atento a aprovechar el nerviosismo catracho. El inapelable 6-0 llevó a la canarinha a la disputa del oro, a medirse con el rival esperado y lógico, que era Alemania, la cual se había impuesto 2-0 a Nigeria. Los africanos más tarde ganarían la de bronce.

Era hora de espantar a los fantasmas de 1950, 2014. Tiempo para superar lo hecho en Seúl o Londres. El escenario era perfecto aunque también angustiante. Brasil inició sorprendida por la joven selección alemana que los puso en apuros a los locales y salieron de los mismos gracias al tiro libre del elegido. Neymar justificaba con un golazo, su presencia en Río cuando ya está comenzando las temporadas de fútbol en Europa.

El segundo tiempo fue de nervios y con una disputa de poder a poder. La actual escuela alemana se hizo presente con una serie de toques que culminaron en el tanto del empate de Max Meyer. Después arrancó el drama, los alargues, estados físicos descompuestos y una infartante tanda de penales que se venía ejecutando con precisión milimétrica hasta que Petersen erró. Dando la oportunidad a Neymar de que culmine con heroísmo la serie y derrote a los fantasmas del fútbol brasileño. El oro por fin es del gigante sudamericano.

 En el fútbol femenino si hubo gloria para Alemania, que pudo derrotar al “outsider” de la competición: Suecia. Las nórdicas se llevaron la plata y se dieron el gusto de eliminar a la archi favorita selección de los Estados Unidos, que tenía un ambiente hostil gracias a la “broma” de la portera Hope Solo sobre el virus Zika. También cayeron las brasileñas, que tenían la responsabilidad de ser la “alegría de emergencia”, en caso de que el fútbol masculino vuelva a fallar. No hizo falta, el país del fútbol está feliz porque en su casa mandó la camiseta verde y amarilla, con Neymar como figura.

 

Edison Guapaz Zambrano
Guitarras y gol