Todo Según el Plan

Esta temporada 2017 de Fórmula 1 confirmó el total dominio de Mercedes en los último años, del mismo modo que a Lewis Hamilton como uno de los más grandes pilotos de nuestra era y por qué no, de la historia.

Más allá del gran esfuerzo de Ferrari por recortar distancias con al escudería alemana, pasada la mitad de temporada y con una ventaja relativamente amplia para Sebastian Vettel, los Mercedes, sobretodo el coche número 44 de Hamilton se impuso al alemán en casi todas las pruebas, manteniendo la regularidad y fiabilidad tanto de su coche como en resultados, demostrando la madurez tanto del piloto como de las escudería en el tramo más importante de la temporada.

Del otro lado, la escudería italiana demostraba exactamente lo contrario junto con su piloto: exceso de nervios, errores torpes (incluyendo un choque de Vettel con su compañero de equipo Raikkonen en la vuelta inicial del GP de Singapur) y la falta de fiabilidad en los coches llevaron a una debacle que definió el título para Mercedes y Hamilton con varias fechas de anticipación a la carrera final.

Atrás de los 2 pilotos principales, estuvieron sus coequiperos, los finlandeses Bottas y Raikkonen, que en ciertas carreras llegaron a ilusionar por su nivel, pero que en el global de la temporada quedaron muy por detrás, ocupando el tercer y cuarto lugar del Mundial de pilotos respectivamente.

Los Red Bull fueron claramente el tercer mejor equipo consiguiendo 3 victorias en el año, con coches que en ciertos circuitos pudieron competir de tú a tú con Mercedes y Ferrari e incluso dominar con cierta claridad. Max Verstappen se presentó en este 2017 como gran figura y revelación. Sin embargo, Ricciardo terminó por arriba del holandés en el mundial debido a su mayor fiabilidad y regularidad.

Force India fue el cuarto equipo del año claramente, sin embargo sus pilotos no consiguieron subir al podio, algo que sí logró Williams con un sorprendente Lance Stroll que se perfila como una de las promesas del deporte para los próximos años. Renault, Toro Rosso y Haas tuvieron un año muy igualado, dejando detrás de sí a un decepcionante McLaren Honda y teniendo como peor equipo de la temporada a Sauber.

A continuación, una corta crónica de los últimos 7 Grandes Premios de la temporada:

GP de Singapur

La carrera se definió en la primera vuelta tras el choque múltiple entre Vettel, Raikkonen y Verstappen, dejando la vía libre para un cómodo “1-2” de Mercedes con Lewis Hamilton en lo más alto del podio.

GP de Malasia

Max Verstappen ganó casi de inicio a fin en Sepang, manteniendo controlado a Lewis Hamilton (segundo), mientras que Vettel remontó desde el final para conseguir un cuarto lugar que si bien lo retrasaba, los dejaba vivo en la lucha por el mundial de pilotos.

GP de Japón

Hamilton obtuvo una victoria tranquila, sobretodo sabiendo que desde casi el inicio de la carrera, Vettel estaba fuera de la misma por un problema de motor, lo cual dejaba aún más claro el panorama del mundial de pilotos y le daba al británico la posibilidad de consagrarse en la siguiente carrera si se presentaban ciertos resultados.

GP de Estados Unidos

Con ilusión de alcanzar el título, Hamilton salió primero, pero en la partida fue superado por Vettal, quien perdió la punta frente al de Mercedes pocas vueltas después sin poder hacer mucho. El alemán llegó segundo y alargó la coronación de Lewis un Gran Premio más. Como nota interesante, el podio tuvo como autoridades a Usain Bolt y al Ex Presidente norteamericano Bill Clinton.

GP de México

¡Y el título llegó! Pese a un toque en la salida con Vettel, Lewis Hamilton finalizó en noveno lugar y se consagró campeón debido a que el alemán solo pudo conseguir el cuarto puesto en una carrera dominada una vez más por el Red Bull de Max Verstappen.

GP de Brasil

Con el campeonato asegurado, Hamilton terminó en cuarto lugar, dejando una cómoda victoria a Vettel que aseguró el subtítulo con un podio integrado por Bottas y Raikkonen acompañando al piloto de Ferrari.

GP de Abu Dabi

El último Gran Premio cerró la temporada con fuerte dominio de Mercedes sobre Ferrari y una victoria de Valteri Bottas con Hamilton segundo y Vettel cerrando el podio.

11 Ideal y Anti 11 del Torneo Ecuatoriano 2017

Un ejercicio tradicional y que tal vez vaya un poco comprimido. Hablamos de los destacados de un campeonato que a pesar de las complicaciones del fútbol del país tuvo varios puntos altos y entretenimiento para sus seguidores. Presentamos entonces el 11 ideal:

Pedro Ortiz

El portero de Delfín fue un bastión para la formidable campaña que tuvo el club manabita en el primer semestre del año, la cual los llevó a disputar por primera vez la Copa Libertadores. Ortiz garantizó seriedad y seguridad, contando con buenos reflejos y oportuna ubicación que a veces pudieron interpretarse como “dosis de suerte”. Las consecuencias fueron obvias al resultar el Delfín el equipo con menos goles en contra de la temporada regular. Así mismo fue refrescante la llegada de un nuevo portero a la élite de guardametas del país. Claro, tendría que mantenerse en los años venideros.

Juan Carlos Paredes

Su llegada a Emelec a mediados de año fue un golpe de timón que dio el cuadro millonario para finalmente llegar al título. En el primer semestre Emelec padeció de cierta debilidad en el sector derecho de su armado, lo que le alejó de ganar la primera etapa por ejemplo, aunque en Libertadores no le iba del todo mal. Con la llegada de “la hormiga” el cambio fue inmediato, aportando toda la experiencia y conocimiento de un seleccionado nacional que ha jugado en Europa. Un puntal tanto a la hora de defender como de atacar.

Jorge Guagua

La afición ni siquiera sabía de la vida de Guagua hasta agosto de 2017: si seguía activo, si se había retirado o qué mismo. Lo cierto es que “el patrón” estaba soportando una larga recuperación tras una dura lesión. De pronto fue incluido en la alineación titular de Emelec y no soltó más su puesto exhibiendo su mejor versión en mucho tiempo con liderazgo y anticipación a las jugadas rivales. Solidificó una defensa que tal vez dejaba pequeñas dudas antes de su llegada y tras la misma fue mucho más difícil de franquear, aportando a la sensacional campaña del bombillo que le llevó a ganar la segunda etapa y posteriormente el título del torneo ecuatoriano 2017.

Francisco Silva

Tal vez el fin de temporada del zaguero paraguayo no fue el mejor, sin embargo, hay que destacarlo por todo lo hecho en el 2017. Silva aportó seguridad y garra a la defensa del Delfín que como se había mencionado, fue la menos batida del torneo y en ello este jugador tuvo mucho que ver. En momentos en los que se ausentó ya sea por lesiones o suspensión el cuadro de Manta lo sufrió sensiblemente. Formó una impecable mancuerna con el venezolano Chancellor que por momentos dio la sensación de absoluta imbatibilidad.

Fernando Gaibor

Debe fácilmente ser uno de los mejores años del volante del Club Sport Emelec. Se convirtió en líder y motor del mediocampo eléctrico con una presencia fundamental para quitar balones y la generación de fútbol ofensivo. Una temporada en la que se ha consolidado como referente y capitán del conjunto millonario y le da perspectivas para un futuro aún mejor al que probablemente se ha demorado en acceder y hoy por hoy hay que destacar que ha ganador notablemente en temperamento.

Ayrton Preciado

Lo consideramos el “jugador más valioso” de la temporada, ya que fue definitivo para la consecución del título de los azules. Veloz y preciso, sus transiciones al ataque fueron armas contundentes a la hora del armado del ataque eléctrico que terminó especialmente hacia el remate de temporada siendo tan contundente. También efectivo frente al arco y a la hora de habilitar a sus compañeros. Sin duda, su mejor año como futbolista profesional hasta el momento, contando con que tiene varios más por jugar.

Carlos Feraud

El señor de los golazos. En los recuentos de mejores anotaciones de la temporada mínimo deben estar el gol olímpico y el de media cancha que marcó en la temporada. El volante de Macará marcó varios tantos con balón detenido, pero no fue lo único destacado de su 2017, sino que fue manija y alma de un equipo que por primera vez consiguió una ansiada clasificación a Copa Libertadores. Le valió por una convocatoria a la selección, lo que finalmente no le terminó sentando tan bien. Pero no deja de haber sido notable su temporada.

Jacob Murillo

El extremo izquierdo de Delfín fue el mejor asistente de la temporada y sus pases gol lo ponen dentro de este 11 ideal. Por momentos su desborde, toque y habilitación fueron realmente brillantes, en espacial cuando se juntaba con sus compañeros que se ubicaban metros más adelante, lo que lo dieron la imagen al conjunto manabita de letal en el contragolpe. Esto lo hizo merecedor a la convocatoria a la selección luego de la cual bajó su rendimiento. Con todo, este fue un excepcional año para este aún joven jugador, al que lo creíamos desaparecido y fue devuelto a jugar en primera división.

Jonatan Álvez

Implacable goleador que de hecho tuvo su mejor rendimiento en competiciones internacionales, aunque en el torneo local también anotó goles claves para que el Ídolo sume puntos valiosos que al final no fueron suficientes tal vez por la sanción en puntos que llevaba Barcelona. Jugador combativo y emblemático en los actuales planteles del cuadro canario al que tal vez su temperamento le puede jugar malas pasadas, mas su calidad y entrega son indiscutibles.

Hernán Barcos

Sería ilógico no incluir al goleador del torneo ecuatoriano dentro de su alineación ideal. El “pirata” marcó notables diferencias en cuanto a su rendimiento con el resto del plantel de Liga Deportiva Universitaria y con sus goles evitó que una campaña que de por sí fue mala termine siendo aún más lamentable. Su categoría y precisión parecen intactas, su identificación con la camiseta blanca innegable, eso sí tal vez su futuro aún se vislumbre incierto. Lo que estamos seguros es que Barcos es uno de los mejores de la historia de los torneos ecuatorianos.

Roberto Ordóñez

Un jugador que debía estar incondicionalmente en este 11 ideal. Encarnó la lucha de un equipo considerado chico hacia su primer título local que finalmente no se dio, pero que será recordada por la afición futbolera ecuatoriana. Roberto Ordóñez fue el símbolo y alma de este Delfín 2017 exhibiendo mucha personalidad y garra, además de un asombrosamente buen manejo de balón y ese adjetivo debido a su corpulencia. Se ganó el cariño de propios y extraños con su entrega y su técnica que tuvieron al cuadro manabita cerca del cetro 2017.

DT: Eduardo Favaro

El estratega uruguayo se sobrepuso a un mal inicio de año a cargo de El Nacional y con un plantel de jugadores que a primera vista lucía limitado, logró un fútbol eficiente, agradable a la vista y que por momentos hizo creer posible que los criollos puedan luchar por el título. Tanta ha sido la incidencia del “Lolo”, que el anuncio de su continuidad con el plantel rojo fue sonada noticia.

Entonces el 11 ideal de nuestra página va así:

Pedro Ortiz; Juan Carlos Paredes, Jorge Guagua, Francisco Silva; Fernando Gaibor, Ayrton Preciado, Carlos Feraud, Jacob Murillo; Jonatan Alvez, Hernán Barcos, Roberto Ordóñez

DT: Eduardo Favaro

Jugador más valioso (MVP): Ayrton Preciado

Este es un 11 alternativo:

Máximo Banguera; Richard Schunke, Jhon Chancellor, Xavier Arreaga; Luis Luna, Roberto Garcés, Manuel Balda, Billy Arce; Carlos Garcés, Juan M. Tévez, Juan Dinenno

DT: Guillermo Sanguinetti

En tanto que les presentamos el Anti  11 del torneo ecuatoriano 2017

Bonard García; Luis Checa, Luis Romero, Luis Caicedo M.; Rubén Olivera, Jonathan González, Luis Bolaños, Felipe Rodríguez; Néstor Martinena, Federico Laurito, Ariel Nahuelpán

DT: Gustavo Munúa

Bonard García: había que poner en este conteo a uno de los porteros del equipo que recibió más de 100 goles. Perdió rápido su titularidad y de hecho su equipo ya no encajó tantos goles luego de no estar él en el arco de Clan Juvenil.

Luis Checa: del mismo modo había que poner a algún defensa del club que recibió más de 100 goles. Sin duda ya quedaron atrás los mejores años del recio defensa y para su mala fortuna le cayó una sanción por doping que afectaría seriamente su carrera.

Luis Romero: el defensa de Guayaquil City, bravo por naturaleza estuvo en este año más pasado de revoluciones que de costumbre. Lo que le costó varias sanciones y el dejar a su equipo afectado en varias ocasiones.

Luis Caicedo M.: El “Kunti” pasó de seleccionado ecuatoriano y embajador deportivo en Brasil a una opaca estadía como suplente en Barcelona. No fue la solución deseada en la zaga amarilla y jamás pudo pelear el puesto a los jóvenes zagueros titulares canarios.

Rubén Olivera: el “pollo” era uno de los refuerzos estrella de la temporada para Liga de Quito, sin embargo estuvo lejos de ser solución en el medio sector universitario y fue responsable de la desastrosa campaña de inicios de año de la “U”.

Jonathan González: fuertemente criticado por la hinchada de Liga de Quito, jamás pudo acoplarse a un equipo en el que curiosamente era titular casi siempre sin mayores resultados. Tampoco le fue bien en Paraguay y ahora enfrentaría una sanción por adulteración de identidad.

Luis Bolaños: el “chucho” definitivamente ya no es lo que era. Aportó a cuenta gotas al juego ofensivo de Fuerza Amarilla para desaparecer a medida que incrementaban los problemas en el club orense.

Felipe Rodríguez: reforzaba en un inicio al sector izquierdo de Liga, pero no sólo lució falto de calidad, sino incluso de entusiasmo y cuando falta voluntad poco se puede hacer. A ser rápidamente olvidado por parte de la hinchada universitaria.

Néstor Martinena: era el llamado a ser goleador de Fuerza Amarilla, pero contó con poca fortuna y solo pudo hacer un gol, lo que concluyó en que sea apartado del plantel antes de finalizar el primer semestre.

Federico Laurito: al atacante argentino le fue bastante bien en Gualaceo de la Serie B e intentó jugar de nuevo en primera división, mas tuvo inconvenientes físicos que sumados a los organizativos del cuadro orense le generaron una mala temporada.

Ariel Nahuelpán: delantero querido por la afición de Barcelona que fue llamado de vuelta para ser el plan de respaldo en caso de ausencia de Álvez, mas nunca fue solución y estuvo bastante lejos del nivel que lo hizo del gusto de la exigente hinchada amarilla.

DT: Gustavo Munúa: llegaba a dirigir a Liga Deportiva Universitaria con cierto cartel y prestigio, pero su idea jamás logró consolidarse y solo pudo ganar 2 partidos en casi medio año (uno por cada campeonato). De las peores campañas que los albos hayan soportado en años.

Foto principal tomada de: El Diario Manabita

Un Final Feliz

Este 2017 para Emelec termina de la mejor manera posible, siendo el campeón de este país, superando claramente al rival en ambas finales y jugando al más alto nivel en todo el año. El equipo llegó al último tramo de la competencia en su mejor momento. Un final soñado, sin dudas.

Ahora, no todo fue alegrías y triunfos. Este equipo tuvo que pasar por muchas situaciones en el transcurso del año que a muchos los hizo pensar que el sueño de lograr un título más se iba a esfumar.

Emelec tuvo salidas de jugadores importantes a inicio del año, dejaron el club. Nombres como: Ángel Mena, Cristian Guanca, Fernando Gimenez, Gabriel Achilier que eran titulares fijos en el equipo, más otros jugadores que conformaban el plantel dieron un total de 14 bajas.

Así mismo llegaron otros jugadores como: Bruno Vides, Christian Ramos, Ayrton Preciado, Joao Rojas, Marlon De Jesús, Romario Caicedo, Sebastián Piriz, entre otros que generaban una expectativa incierta sobre lo que iban a poder rendir y aportar en este año.

El año empezó mal, el DT Alfredo Arias no encontraba el equipo y algunos llegaron a pensar que con el paso del tiempo se jugaba cada vez peor. Se sufrió bajas por lesiones en varios momentos del primer semestre, incluso se afrontó Octavos de Final de Libertadores sin el centro delantero titular y sin el primer suplente. Todos estos pequeños detalles concluyeron en la eliminación del equipo de este Torneo Internacional y además se tuvo que ver como se escapaba la primera etapa que la termina ganando Delfín de Manta con sobra de merecimientos.

El segundo semestre del año inició con muchas dudas. Cierta parte de la hinchada comentaba que no se permitiría un “fracaso” más y que el DT Alfredo Arias estaba obligado a ganar la segunda etapa y evitar que el club acumule 4 Etapas seguidas sin ganar.

Las incorporaciones de 2 jugadores importantes como Juan Carlos Paredes y Fernando Luna mejoraron al equipo, las fechas pasaban, los lesionados se recuperaban y el equipo empezaba a aparecer de a poco. Se fue ganando partidos claves que le dio confianza al plantel como la fecha doble contra Deportivo Cuenca, que en ese momento era único líder del Campeonato.

Emelec llegó a la recta final de la competencia en su mejor momento. La gente y la prensa conocía el 11 titular de memoria, algo que era imposible en los primeros 8 meses del año. El equipo lucía cada vez más sólido y cerró un año de gran manera ganando 7 de los últimos 8 partidos que jugó, incluyendo las 2 finales contra Delfín.

El repunte de jugadores claves como: Jorge Guagua, Christian Ramos, Esteban Dreer, Fernando Gaibor, Ayrton Preciado, Osbaldo Lastra, Oscar Bagüí y Brayan Angulo hicieron que este Emelec llegue intratable a los últimos partidos y logre la corona número 14, que parecía imposible para algunos durante muchos momentos del año pero que los jugadores y Cuerpo Técnico nunca dejaron de soñar.

Hoy Emelec es justo campeón de Ecuador por muchas razones, principalmente porque pudo levantarse cada vez que se cayó y que nunca dejaron de pelear por mas difícil que se veía el panorama.

Felicito a todos los que hicieron posible este título, desde el Presidente Neme, el DT Alfredo Arias y los jugadores. Confío en que los logros deportivos seguirán llegando, porque esto es Emelec, un club demasiado grande que debe pelear siempre, contra todo y contra todos.

Foto principal tomada de: Radio Huancavilca

Año de Reposicionamiento Internacional y Frustración Interna

No es habitual cuando se hace un resumen de una temporada encontrar sensaciones tan disímiles como el 2017 de Barcelona Sporting Club. El fabuloso andar por la Copa Libertadores de América, en el que el club llegó hasta semifinales por primera vez en 19 años, no puede ocultar el sinsabor de un exiguo quinto lugar en el campeonato nacional que le impedirá volver a estar presente el próximo año en el máximo torneo continental.

Luego de un título 2016 inolvidable y lleno de récords, el proyecto continuó en manos de Guillermo Almada y con, básicamente, el mismo plantel que logró el campeonato del torneo anterior. Se sumaron como refuerzos principales a Ariel Nahuelpán, quien retornó al club luego de cuatro años, y a Jefferson Mena para reemplazar la vacante dejada por Anderson Ordóñez. El reto del 2017 era claro con la doble competencia: llegar lo más lejos posible en la Libertadores, tal como era una de las promesas de campaña de José Francisco Cevallos (“volver a ser un coloso de América”), y revalidar el título nacional con un bicampeonato que no se obtiene desde 1981.

Desde el sorteo de la Copa Libertadores quedó claro que el andar internacional no iba a ser un camino sencillo: la fase de grupos dejó al Ídolo en una llave complicada junto al campeón vigente Atlético Nacional, al argentino Estudiantes de La Plata y al brasileño Botafogo. Sin embargo desde el debut se vio claramente que Barcelona iba a ser un protagonista importante de esta edición del torneo continental: una brillante victoria sobre Atlético Nacional y dos triunfos  de visitante en La Plata y Río de Janeiro le dieron la clasificación a octavos de final con dos partidos de anticipación y practicando un juego muy intenso, veloz y con la identidad que lo marcó el año anterior.

En la siguiente fase el cuadro torero se encontró con otro obstáculo complicado: el campeón brasileño Palmeiras. Una vez más Barcelona volvió a brillar con dos muy buenos partidos en una llave que se terminó decidiendo desde los tiros penales en donde emergió la figura de Máximo Banguera, uno de los valores individuales más destacados del plantel en el año. Los cuartos de final traerían un nuevo rival paulista: Santos. Tras un trabajoso empate rescatado por el oportunismo de Jonatan Alvez, la gran figura de la temporada, llegó el momento cumbre del curso: la victoria en Vila Belmiro, con una presentación nítida y sólida de la escuadra canaria que debió ganar con una mayor diferencia que la que dejó el solitario gol de Alvez. Las semifinales trajeron al tercer rival brasileño consecutivo, el Gremio de Porto Alegre, que se llevó un incontestable triunfo de visita en el Monumental y el fin de la ilusión copera barcelonista.

El paso del Ídolo en la Libertadores llenó de orgullo a toda su afición, que volvió a ver a su equipo como protagonista en un torneo en el que era una de las grandes referencias sudamericanas hasta finales del siglo pasado. Barcelona se convirtió en el primer equipo de la historia que consiguió 3 victorias como visitante en Brasil y su goleador Jonatan Alvez se convirtió en el segundo jugador del club que anotó 6 goles en una misma edición de la Copa, además que entró en la consideración para mejor jugador del torneo. Una participación indudablemente histórica y valiosa.

A nivel local el trajín de la Copa terminó afectando el rendimiento del equipo en el campeonato en donde partía como favorito para el título, sumado a otros factores externos que afectaron al club como: la suspensión del Monumental en el primer partido como local ante Macará por los disturbios ocasionados por la barra que dejaron al menos 45 heridos y la pérdida de 6 puntos dictaminada por la FIFA por una deuda mantenida con Boca Juniors que a la larga incidió para que Barcelona no clasificara a la Libertadores del próximo año. No obstante, la Primera Etapa del campeonato del Ídolo fue bastante buena, llegando a pelear la posibilidad de ganarla hasta que perdió con Delfín de local en el Monumental en un encuentro en el que el cuadro torero fue superior en gran parte del mismo pero no pudo conseguir el triunfo debido a su mayor falencia de este año: la falta de concreción de goles en comparación con la cantidad de oportunidades generadas. Esta falencia fue mucho más notoria en la Segunda Etapa en la que encadenó ocho partidos consecutivos sin ganar a pesar de merecer el triunfo en la mayoría de ellos y que fue clave para el séptimo lugar alcanzado en dicha fase.

Este último punto es importante resaltar porque, a diferencia del torneo pasado, hubo varios valores individuales que disminuyeron o fueron inconstantes en su nivel. Ely Esterilla, Marcos Caicedo, Washington Vera, Pedro Velasco, Mario Pineida y hasta el mismo Damián Díaz, no rindieron en diferentes momentos de la temporada al igual que el 2016, y eso se vio reflejado en las cifras goleadoras del equipo. Jonatan Alvez anotó el 35% de los goles del plantel, 20 en campeonato y 6 en Libertadores, cuando el año pasado representó solo el 21% de las anotaciones.

Es de resaltar la aparición y consolidación de jóvenes valores como la dupla de defensas centrales conformada por Darío Aimar y Xavier Arreaga que mantuvieron la titularidad a pesar de la llegada del colombiano Mena y de Luis Caicedo. El aporte de emergentes como Erick Castillo, José Ayoví y Tito Valencia (hasta su fea lesión de fractura de peroné), y la incansable labor del capitán Matías Oyola y de Gabriel Marques en la media cancha, como elementos destacados de la temporada aparte de los ya mencionados Alvez y Banguera. Gran mérito en esto es de Guillermo Almada, de quien se debe destacar que cumplió su segundo año completo al frente del plantel, algo que no ocurría en mucho tiempo en el club.

El 2018 queda marcado como un año en el que Barcelona deberá enrumbar su rendimiento en el torneo local, en el que seguramente una vez más partirá como uno de los favoritos para hacerse con el título a sabiendas de que el plantel se mantendrá en su gran mayoría de acuerdo a lo expresado por la dirigencia canaria y en el que se intentará volver a la Copa Libertadores luego de su gran participación en este año. A nivel internacional queda realizar una actuación similar en la Copa Sudamericana donde se enfrentará en primera fase al paraguayo General Díaz.

Foto principal tomada de Metro Ecuador

¡Bienvenidos Puerto Quito y Orense!

La Serie B del 2018 tendrá debutantes absolutos en la categoría con la participación del Club Puerto Quito y Orense SC. En el caso de los primeros, llevarán a la ciudad de Puerto Quito por primera vez la Serie B.

 Puerto Quito marcó notables diferencias en el cuadrangular final que de hecho tuvo un arranque muy apretado con los juegos generalmente finalizando en empates, mas las victorias de los pichinchanos por 2-1 ante Rocafuerte y 3-1 ante Chacaritas, ambas en su patio, les permitió acomodarse en el primer lugar con holgura. Por otra parte, el conjunto bananero con 4 empates al hilo conservaba un segundo lugar que no terminaba de ser tan auspicioso.

 En la quinta fecha repentinamente se resolvió el torneo. Prácticamente Puerto Quito estaba ascendido y llegaba relajado a Guayaquil para enfrentarse a Rocafuerte, al que venció por 1-0 dejándolo casi fuera de combate. Luego en Machala la oportunidad estaba para Orense, quienes en un dramático juego doblegaron 1-0 a Chacaritas, logrando su anticipado paso a Serie B. En la última fecha los ascendidos igualaron 0-0 confirmando el título en la categoría para Puerto Quito.

 Recordando el paso de los ascendidos. En el caso de Puerto Quito, había finalizado segundo en el torneo de Pichincha, mientras que Orense fue el ganador del torneo de El Oro. En los zonales Puerto Quito también había finalizado segundo detrás de Chacaritas, mientras que Orense ganó el suyo. Puerto Quito y Orense se juntaron en los cuadrangulares semifinales donde los de Pichincha finalizaron primeros y los de El Oro como mejores segundos accedieron al cuadrangular final.

 Jean Robledo, Guiner Vergara y William Araujo entre otros fueron las figuras de Puerto Quito, mientras Víctor Valle, Wagner Muñoz o el portero Rolando Silva fueron pilares en la campaña Orense.

Un Año Más…

Un año más en el que Liga transita en el ostracismo, lejos de cualquier pelea por titulos o algo importante. Los hinchas cada vez más se hunden en la desesperación y la nostalgia de los tiempos pasados que tantas alegrías trajeron.

Para iniciar este 2017 Liga ilusionó, primero, con la contratación de Hernán “El Pirata” Barcos, luego, con la contratación de Gustavo Munúa, campeón con Nacional de Uruguay como DT y varios jugadores que invitaban a pensar que se dejaría atrás el recuerdo de un 2016 de Borghi, Alemán, un DT uruguayo que nadie recuerda el nombre y la lucha por el descenso. Sin embargo, el equipo dirigido ahora por Munúa pasó casi toda la primera mitad de año en los últimos lugares, acumulando tan solo una victoria en el torneo local y sumiendo al equipo e hinchada en una profunda depresión.

Tras el fracaso estrepitoso con el técnico charrúa, la dirigencia decidió despedirlo y traer a un conocido del medio local: Pablo Repetto. Con él llegaron unas cuantas victorias y se salió del sofoco del descenso latente que se vivía con Munúa. Se superaron dos etapas de Copa Sudamericana (contra Defensor Sporting De Uruguay y Bolívar de La Paz), sin embargo, nunca se llegó a consolidar el equipo, siempre guiado por un Barcos inconmensurable, que cuando estaba ausente dejaba un grupo de fantasmas del que mucho no se podía esperar. Se alternó en el arco con Daniel Viteri y Leonel Nazareno sin llegar a una esperada seguridad. Las incorporaciones de medio semestre también ayudarían a por le menos evitar rondar los últimos lugares, mas Lucas de Lima no le dio la suficiente velocidad al centro de la zaga que conformó con Horacio Salaberry, Aníbal Chalá estuvo muy lejos de su nivel 2016 con El Nacional, Sherman Cárdenas no tuvo los minutos esperados en la titularidad y su calidad se mostró a cuentagotas, mientras que Jonathan González siempre fue permanentemente criticado por la hinchada. Tal vez la mejor noticia fue el regreso de Juan Luis Anangonó quien junto a Hernán Barcos se encargaron de rescatar varios puntos que parecían perdidos. El “pirata” incluso pudo consagrarse como goleador del torneo local.

En Copa Sudamericana se perdió la llave contra un viejo conocido: Fluminense, por un error infantil en defensa al regalar un tiro de esquina, mientras que en el campeonato local, se ilusionó a la hinchada con una victoria contundente contra Delfín, que terminaría siendo subcampeón, para terminar estrellándose de bruces con unas dolorosísimas derrotas contra El Nacional, Barcelona y Emelec que devolvieron al equipo al lugar donde perteneció este 2017: octavo entre 12, lo cual le llevó a jugar un “repechaje” contra Técnico Universitario para asignar el último cupo para la Copa Sudamericana 2018. Algo para rescatar en Liga fue la pareja de volantes centrales armado con Jefferson Intriago y Edison Vega, así como el año cumplidor sin ser brillante de gente de la casa como José Cevallos Enríquez, Johan y Anderson Julio. José Quintero pasó permanentemente con problemas físicos, lo que también golpeó al plantel de Liga en general durante el 2017.

En aquella última eliminatoria que buscaba un cupo a Sudamericana se puede resumir el año de Liga. En el partido de ida en la ciudad de Ambato se vio superado por los locales, y perdía 1-0 casi al completar los 90 minutos, sin embargo, jugadas geniales de Barcos y Salaberry dieron la victoria agónica a los azucenas. En la vuelta Liga empezó dominando y ganando 3-0 lo cual ilusionó a la hinchada, pero se perdió el rumbo y los ambateños empataron el partido, y Liga terminó pidiendo tiempo para ganarle a un equipo de una categoría inferior.

Este 2017 será un año muy olvidable para la hinchada blanca, donde mucho no se puede sacar, simplemente esperar (nuevamente) que el año entrante se arme un equipo que pueda pelear algo y no deje a los hinchas con un amargo sabor de boca y recordando los 10 años de su momento más feliz.

Foto Principal: API

Una Sinfonía Agridulce

Terminó el 2017 para el Club Deportivo El Nacional con un balance finalmente positivo en su juego. Sin embargo, ese pico de rendimiento alcanzado en las últimas fechas dejó cierta sensación de insatisfacción ya que el acceso a Copa Sudamericana pareciera saber a poco debido al juego desarrollado.

Habrá que recordar como fue el inicio de los rojos de la presente temporada. Tras la dolorosa eliminación en su breve retorno a Copa Libertadores, el equipo atravesó por un bache futbolístico explicable porque ya no contaba con varias figuras del año anterior, así como por un rendimiento inferior al esperado de quienes quedaron. Ante esto, los resultados eran poco halagadores y el equipo criollo llegaba a junio con tan solo un triunfo y comprometido seriamente con el descenso. Sin embargo, hacia el fin de la primera etapa pareció enmendarse.

Nacional supo encontrar un once ideal y un par de relevos que tal vez no eran los suficientes ya que el plantel en sí es corto. De todas maneras, su hinchada y la prensa especializada ya podía recitar prácticamente de memoria una alineación: Johan Padilla; Rinson López, Frankin Guerra, Luis Segovia, Edder Fuertes; Roberto Garcés, Jonathan Borja; Manuel Balda, Adolfo Muñoz, Alejandro Villava; Bryan De Jesús (Miguel Parrales). El Director Técnico, Eduardo Favaro, había empezado a acumular críticas, pero supo dar un golpe de timón para esbozar un equipo que dio seria pelea.

En el arco fue consolidándose Johan Padilla como un arquero en quien confiar con magníficos reflejos y excelente ubicación, tal vez aún costándole la salida en el juego aéreo como suele pasar con los porteros ecuatorianos. Además de atajar pelotas claves en momentos decisivos de varios partidos, se trata de una figura carismática que se ganó el cariño de la hinchada. Es sin duda importante que su renovación haya sido tratada a tiempo.

El gran problema de Nacional en este 2017 fue su defensa. En el año encajó 62 goles, lo que está bastante distante de lo conseguido por los clubes que ocuparon los primeros lugares del torneo. Franklin Guerra y Luis Segovia normalmente ocuparon los puestos del centro de la zaga y tuvieron problemas físicos como de suspensiones por a veces no saber controlar su temperamento, por lo que Javier Quiñónez fue el primer reemplazante. Hacia el final del año llegaron a la solidez necesaria para conseguir los puntos que permitieron soñar con una disputa del título. Rinson López por derecha y Edder Fuertes por izquierda fueron los carrileros que cumplieron una labor importante marcando y elaborando fútbol ofensivo.

Sin embargo, los elogios para la tropa de Favaro van de mediocampo hacia arriba. Con un osado planteamiento que llevaba un solo volante central, la responsabilidad cayó en Roberto Garcés para ese puesto. El “gato” reguló los hilos y tiempos del conjunto militar con el aplomo de un veterano. La creación de fútbol ofensivo estuvo a cargo de Manuel Balda, Jonathan Borja y Alejandro Villalva, quienes lograron desarrollar un juego coordinado, armónico y vistoso que condujo a Nacional no solo a ser un rival temible, sino que a la vez era elogiado por propios y extraños. El toque de primera, la precisión en velocidad que mostraron en los últimos meses del año fue de lo más destacado del mismo. Para el relevo estuvo la experiencia de Pedro Larrea, Daniel Samaniego y Cristian Cordero.

El Nacional fue el cuadro más goleador de la temporada regular con 73 goles a favor. Distinción que hace rato largo ya no la tenía y fue lograda gracias a toda la generación de fútbol ofensivo de la cual fue nexo Adolfo Muñoz, quien compartió tareas con el medio sector con talento y energía, apoyando al atacante en punta que fue Bryan De Jesús en algún momento y Miguel Parrales mientras estuvo en plenas condiciones físicas. Tanto De Jesús como Parrales fueron de menos a más, aprendiendo de su posición y convirtiéndose en eficaces goleadores.

Nacional terminó este 2017 con 64 puntos, de los cuales 41 fueron conseguidos en la segunda etapa, lo que habla claramente de las diferencias que hubo entre el primero y segundo semestre del rojo. 14 derrotas en el año suenan a mucho para un equipo que en algún momento aspiró a pelear el título, pero habrá que recordar que tan sólo 5 fueron en la segunda etapa. Los goleadores criollos fueron: Bryan De Jesús con 15 goles, Adolfo Muñoz con 11 y Miguel Parrales con 10 tantos. 12 de los 17 triunfos criollos del año alimentaron el sueño de poder llegar a la final, pero tal vez la caída como local ante Deportivo Cuenca y el empate ante Barcelona también en el Atahualpa fueron los puntos perdidos que al final pesaron para que dicho anhelo se desvanezca.

Se viene el 2018 para los puros criollos con una directiva reelecta en un proceso que fue por lo menos convulsionado y que aún mantiene a la gente interesada en el club con tensión dentro de un año en el que la disputa política colaboró poco con el equipo. Se ha llegado a un acuerdo para la permanencia de Eduardo Favaro en la dirección técnica el cual se supone incluye la capacidad de conservar a la mayor parte del plantel 2017 y en eso parecen estar encaminados. Siendo así, la perspectiva sería optimista para el próximo año en aras de al menos estar en la parte superior de la tabla de posiciones y con la mirada puesta en hacer un mejor papel en el torneo internacional a disputar, en este caso la Copa Sudamericana donde el primer rival será el San José de Oruro.

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Libertadores y Sudamericana 2018 a la Orden

En este año se procedió al sorteo conjunto de los 2 torneos internacionales del continente que desde 2017 se vienen desarrollando en paralelo. No ha variado el formato de ambas competiciones que han facilitado la intervención de más equipos y se podría decir que en la temporada que cerró el efecto fue positivo por las emociones dadas a la afición.

En el caso de la Libertadores, las rondas previas a las fases de grupos fueron dispuestas de esta forma:

 

Fase 1

Montevideo Wanderers (Uruguay) vs Club Olimpia (Paraguay) (E1)

CSD Macará (Ecuador) vs Deportivo Táchira (Venezuela) (E2)

CD Oriente Petrolero (Bolivia) vs Universitario de Deportes (Perú) (E3)

 

Los ganadores de esta primera ronda avanzarán a la siguiente donde se unirán a otros 13 clubes. Estos son los emparejamientos:

 

Fase 2

E2 vs Independiente Santa Fe (Colombia) (C1)

Chapecoense (Brasil) vs Club Nacional (Uruguay) (C2)

E3 vs Jorge Wilstermann (Bolivia) (C3)

Carabobo FC (Venezuela) vs Club Guaraní (Paraguay) (C4)

E1 vs CDP Junior (Colombia) (C5)

Universidad de Concepción (Chile) vs CR Vasco da Gama (C6)

CA Banfield vs Independiente del Valle (C7)

CD Santiago Wanderers vs FC Melgar (Perú) (C8)

 

Si Macará logra superar la fase de grupos enfrentaría a Independiente Santa Fe de Colombia. Los ganadores de esta segunda ronda tendrán los siguientes cruces en la última fase previa a los grupos:

Fase 3

C1 vs C8 (Ganador 1)

C2 vs C7 (Ganador 2)

C3 vs C6 (Ganador 3)

C4 vs C5 (Ganador 4)

 

En caso de superar la segunda ronda, Macará enfrentaría al ganador de Santiago Wanderers vs Melgar, si Independiente del Valle logra avanzar de fase jugaría contra el ganador del  enfrentamiento entre Chapecoense y Nacional de Montevideo. Los 2 equipos con mayor puntaje que queden eliminados en esta última fase previa jugarán la Copa Sudamericana. Los ganadores se integrarán a la fase de grupos que fue sorteada de la siguiente forma:

Grupo 1

Gremio FBPA (Brasil)

Club Cerro Porteño (Paraguay)

Defensor SC (Uruguay)

Monagas SC

 

Grupo 2

Atlético Nacional (Colombia)

Club Bolívar (Bolívar)

CSD Colo – Colo (Chile)

Delfín SC (Ecuador)

 

Grupo 3

CA Peñarol (Uruguay)

Club Libertad (Paraguay)

The Strongest (Bolivia)

CA Tucumán (Argentina)

 

Grupo 4

CA River Plate (Argentina)

CS Emelec (Ecuador)

CR Flamengo (Brasil)

Ganador 1 (podría ser Macará)

 

Grupo 5

Cruzeiro EC (Brasil)

Universidad de Chile (Chile)

Racing Club (Argentina)

Ganador 3

 

Grupo 6

Santos FC

Estudiantes LP

AC Real Garcilaso (Perú)

Ganador 2 (podría ser IDV)

 

Grupo 7

SC Corinthians

CA Independiente

Millonarios FC (Colombia)

Deportivo Lara (Venezuela)

 

Grupo 8

CA Boca Juniors (Argentina)

SE Palmeiras (Brasil)

Alianza Lima (Perú)

Ganador 4

 

El 22 de enero comienza a disputarse las primeras rondas de Copa Libertadores, dicho día Macará tendrá su debut, el 30 de enero será el de Independiente del Valle, el 28 de febrero arranca Delfín jugando ante Bolívar, mismo día que Emelec frente al ganador 1. Como bien se sabe, los 2 primeros de cada grupo avanzarán a octavos de final, mientras que los terceros serán trasladados a la Copa Sudamericana.

La primera fase de la Copa Sudamericana 2018 fue sorteada de la siguiente manera:

 

Everton Viña del Mar (Chile) vs Caracas FC (Venezuela)

Estudiantes de Mérida (Venezuela) vs Deportes Temuco (Chile)

CA Lanús (Perú) vs Club Sporting Cristal (Perú)

Deportivo Cali (Colombia) vs Danubio FC (Uruguay)

CA San Lorenzo (Argentina) vs CA Mineiro (Brasil)

LDU Quito (Ecuador) vs CD Guabirá (Bolivia)

Club Nacional (Paraguay) vs CD Mineros de Guayana (Venezuela)

CS Rosario (Perú) vs CA Cerro (Uruguay)

Club Sol de América (Paraguay) vs Independiente Medellín (Colombia)

Barcelona SC (Ecuador) vs Club General Díaz (Paraguay)

CS Luqueño (Paraguay) vs CD Cuenca (Ecuador)

UT Cajamarca (Perú) vs Rampla Juniors FC (Uruguay)

CSD Defensa y Justicia (Argentina) vs América de Cali (Colombia)

CA Paranaense (Brasil) vs CA Newell’s Old Boys (Argentina)

Unión Española (Chile) vs Sport Huancayo (Perú)

Jaguares de Córdoba (Colombia) vs CA Boston River (Uruguay)

CA Rosario Central (Argentina) vs Sao Paulo FC (Brasil)

CD El Nacional (Ecuador) vs San José de Oruro (Bolivia)

CSD Blooming (Bolivia) vs EC Bahía (Brasil)

Zamora FC (Venezuela) vs CA Colón (Argentina)

Audax Italiano (Chile) vs Botafogo FR (Brasil)

Fluminense FC (Brasil) vs Nacional Potosí (Bolivia)

 

La primera fase se desarrollará entre febrero y mayo de 2018 y a los ganadores de esta ronda se les sumará los equipos trasferidos de Copa Libertadores para el sorteo de la segunda ronda a realizarse en junio.

El debut de Deportivo Cuenca será el 13 de febrero, el 20 arrancará Barcelona, el 22 será el turno de El Nacional, mientras que Liga tendrá que esperar hasta el 10 de abril.

¡Emelec Campeón 2017!

Emelec derrotó 2-0 a Delfín en juego de vuelta disputado por la final del Torneo Ecuatoriano de fútbol. Con ello, el cuadro millonario se coronó campeón del 2017.

Con la ventaja inicial de 4-2, Emelec llevaba una apreciable ventaja frente a su novel rival, el cual adolecía de 2 bajas importantes para este definitivo encuentro como el defensa Silva y el atacante Garcés al menos en su 11 inicial. Con un estadio del puerto manabita todavía con los estragos del sismo del año pasado, inició el duelo final, un duelo de técnicos uruguayos como Guillermo Sanguinetti del lado cetáceo y Alfredo Arias del eléctrico.

Cómo era de esperarse, Delfín inició el encuentro con mucho vértigo aunque poca prolijidad para asustar a la zaga eléctrica que aguardaba con mucho orden, aunque progresivamente se iba replegando en tanto que los manabitas sumaban gente en ataque. A saber que tenía la ventaja el bombillo, no desesperaban en el traslado del balón a pesar que pasaba cruzaba poco su propia cancha.

Con el tiempo transcurriendo parecía tempranamente llegar la desesperación al local que si bien tenía el balón y lo circulaba en los alrededores del área millonaria, sus incursiones no terminaban de ser claras, finalizando sus jugadas con remates defectuosos si acaso estos ocurrían. Duffard y Sierra jugaban bastante adelante y cerca de la media hora eso se tradujo en mayor preocupación para el club guayaquileño. Paredes y Murillo no supieron concluir un par de jugadas importantes sin poder patear al arco.

Delfín no aflojaba en la presión y era claramente superior en el duelo de mediocampo donde Lastra y Gaibor apenas podían tocar la pelota, mientras que por los costados Patta y Murillo sumaban con más desgaste que efectividad. Siendo apremiante el momento de Emelec, Ayrton Preciado (44 min.) con la cabeza tras un tiro libre de Burbano abrió el marcador y pareció desvanecer las aspiraciones manabitas.

El equipo de Manta jugó una carta ofensiva con la entrada de Chicaiza y prosiguió con su juego vertiginoso ahora buscando el empate. Eran los mejores minutos de Ordóñez quien con su físico hacía pasar más a los zagueros azules, en tanto que por los costados llegaban centros que eran mejor resueltos por Guagua y Ramos. Nuevamente Emelec se encontraba encerrado, pero del mismo modo, lo poco que producía era severamente sufrido por el conjunto manabita.

Con todas las líneas adelantadas y envueltos en el desorden y nervios, Delfín descuidó mucho la marca y en eso, un pase filtrado dejó a Brayan Angulo en gran posición para esquivar a su rival y definir con calidad (64 min.) para estirar las diferencias. A raíz del segundo tanto el juego entró en una tensión propia de tener casi sentenciado el trámite de la instancia. Llegaron las rencillas y el desconcierto del equipo que venía perdiendo, ahora sí viéndose completamente superado por su rival.

En los minutos finales, con el juego casi resuelto, Emelec jugó distendido y haciendo las cosas mucho mejor que su rival, que apenas atinaba a empujar con esfuerzos individuales, pero ya desdibujado totalmente en sus líneas, llegaron los cambios de jugadores cuando el partido concluía. Emelec esperó el pitazo final tocando el balón.

Emelec ha conseguido su título 14 en la historia de los torneos ecuatorianos de fútbol. Sus anteriores torneos: 1957, 1961, 1965, 1972, 1979, 1988, 1993, 1994, 2001, 2002, 2013, 2014, 2015.

DEL: Pedro Ortiz; Marcos Cangá, Jhon Chancellor, Luis Luna (TA 35’), Giovanny Nazareno; Matías Duffard (TA 38’), Jordan Sierra, Henry Patta (Cristian Malán 82’), Jacob Murillo (Andrés Chicaiza 45’); Joao Paredes (Bryan Oña 58’), Roberto Ordóñez (TA 67’)
EME: Esteban Dreer (TA 50’); Juan C. Paredes (TA 68’), Jorge Guagua (TA 67’), Christian Ramos, Oscar Bagüí; Fernando Gaibor, Osbaldo Lastra; Fernando Luna (Hólger Matamoros 62’), Ayrton Preciado, Robert Burbano C. (Bruno Vides 80’); Brayan Angulo (Pedro Quiñónez 83’)
Goles: Preciado 44’, Angulo 64’

Calificaciones Delfín:
Ortiz 5
M Cangá 5
Chancellor 4
Luna 5
Nazareno 6
Duffard 5
Sierra 6
Patta 4
Murillo 3
Paredes 3
Ordóñez 6
Chicaiza 5
Oña 5
Malán –

Calificaciones Emelec
Dreer 7
Paredes 6
Guagua 7
Ramos 7
Bagüí 5
Gaibor 5
Lastra 6
Luna 6
Preciado 7
Burbano 6
Angulo 6
Matamoros 5
Quiñónez –
Vides –

T2: Entre la Nostalgia y la Resignación

En este año se estrenó Trainspotting 2, la secuela del clásico film noventero que se estrenó hace 21 años ya. Con la expectativa de sus seguidores, la nueva película estuvo a la altura de las expectativas, tal vez sin superar a la primera diría su fanaticada, pero divertida al fin.

Tras 20 años, Mark Renton vuelve a su Edimburgo natal y su reencuentro con personas, lugares y sensaciones varía en matices que en todo caso están lejos de ser gratas, algo lógico de esperarse, sabiendo las circunstancias en las que Renton dejó su tierra. El shock de la nostalgia mezclado con la propia incapacidad de reconocimiento de un lugar que no se ha visto en 20 años. El tiempo no pasó en vano ni en la gente ni en las cosas.

Renton se vuelve a ver con su antigua pandilla en orden de afectos: A Spud, por quien siempre tuvo compasión, quien tiene un presente poco alentador, aún adicto y con escasa estima por la vida, después está el agrio reencuentro con Simon (dejando el mote de “Sick Boy” atrás), quien vive de la extorsión juta a su novia y finalmente el traumático encuentro con Begbie, el psicópata, quien desde luego se la tiene a Renton “jurada”.

Trainspotting 2 transcurre de una manera mucho más lenta que su pre cuela, lo que cobra sentido sabiendo que sus protagonistas son de edades más maduras, valdrá la pena decir que es elogiable contar con el reparto original. Lejos queda el vértigo de las aventuras noventeras y si bien no dejan de meterse los protagonistas en líos divertidísimos, a estos les toma su tiempo en desarrollarse. Ciertamente quienes vieron el primer film entenderán varias más de las “gracias” que ocurren en esta segunda entrega.

El tema principal de “Trainspotting 2” es la nostalgia. La evocación de tiempos idos corre por cuenta de los recuerdos que se intercalan en la trama, los cuales incluyen pedazos de la película vieja más algunas escenas de lo que aparentemente sería la infancia de los protagonistas, a lo que también se agregan fotos de la juventud y relatos escritos en los que Spud comenzó a trabajar, contando las aventuras de los “buenos tiempos”.

Sin embargo, tras esa nostalgia hay una crítica hacia la misma, desarrollada sutilmente por Veronika, la novia de Simon, quien manifiesta su desacuerdo con la permanente posición evocadora de recuerdos tanto de su pareja como de Mark, comparando con la realidad de su país de origen (ella es de Europa del Este), en donde se prefiere dejar el pasado atrás. Podría ser comparable a como Diane en el film de los 90 advierte a Renton sobre los constantes cambios en los gustos y estilos de vida y como el grupo de Mark no los llevan consigo y se estancan en las mismas memorias que en decididos términos los estancan. Ahora, en Trainspotting 2 se puede observar que si bien el paso del tiempo es visible físicamente en los personajes, estos no han cambiado mayor cosa, incluso Renton, quien había “escogido la vida”. La diferencia es que no haber evolucionado de lo que eran en sus años veintes para personas en sus cuarentas puede ser deprimente.

La primera película hablaba de la adicción, la cual sigue estando presente en Trainspotting 2, pero transformada a veces como razón de ser y en otros breves momentos como motivo de evocación a la nostalgia justamente. Acá se habla también de canalizar las adicciones, pues ciertas personalidades inevitablemente tienen ese rasgo adictivo y para evitar poner en riesgo su salud o su vida misma es necesario trasladar esa adicción hacia otras actividades como el estilo de vida saludable o las redes sociales (guiño crítico a las actuales tendencias de la sociedad), conductas sin duda menos peligrosas que la vida de un heroinómano.

Finalmente se podría enfocar a la película como una lucha entre avanzar o quedarse ahí mismo y tal vez haberse dado cuenta de ese dilema demasiado tarde o intentar ser feliz con lo que buenamente se es, mientras hay como reírse de su propia tragedia.