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El Anti Equipo del Torneo Ecuatoriano 2016

Así como en casi todos lados escogen a los mejores jugadores de cada torneo, también es un buen ejercicio encontrar aquel once que representó todo lo contrario: pesares, frustraciones y molestias en la afición. A continuación, el anti 11 del torneo ecuatoriano 2016.

Sebastián Blázquez:

El portero argentino ya ha cumplido varias temporadas en el fútbol ecuatoriano y esta ha sido la más baja. Al inicio del año fue culpable de varios goles insólitos que hicieron perder puntos increíbles al Aucas, club que finalizó perdiendo la categoría. Se puede también mencionar que su rendimiento fue afectado por calamidad doméstica y puede ser comprensible. Terminó siendo relegado a la banca por Padilla y veremos si sigue en nuestro fútbol o toma otros rumbos.

José Madrid:

El marcador derecho milita ya varias temporadas en Liga Deportiva Universitaria y de él se esperaba un rendimiento similar al que alguna vez se lo hizo considerar para selección nacional. Su fútbol nunca despegó y ha sido cuestionado por hinchada y prensa especializada. Poco a poco fue perdiendo espacio hasta no ser tomado en cuenta ni a la banca por Aguinaga. Finalmente no estará en el club albo en 2017.

Edison Carcelén:

La zaga del conjunto oriental tuvo bastantes problemas a principios de año para consolidar su zaga y uno de ellos fue las continuas suspensiones por juego violento de este zaguero. Su habitual juego brusco lo pone en esta alineación a pesar que también es un zaguero con gol y de hecho, tuvo mejores actuaciones sobre el final de temporada.

José Luis Perlaza:

El eterno “zancudo” es un zaguero experimentado y este año fue a parar al Mushuc Runa. Es muy sabido que se trata de un jugador luchador y con coraje, pero de escasa capacidad técnica y con el paso de los años, ya se observa más lo segundo que lo primero. Permanentemente desprolijo en la marca y proclive a sanciones, fue uno de los tantos puntos bajos del cuadro del ponchito que finalmente perdió la categoría.

Julio Ayoví:

Marcador zurdo que llegó a Liga Deportiva Universitaria a tomar supuestamente la posta en el cada vez más veterano plantel albo. Fue titular en un inicio, pero terminó perdiendo espacio para finalmente dejar siquiera de ser tomado en cuenta en las convocatorias. Calamitoso en Copa Libertadores, distó mucho de lo que exhibió en sus temporadas en Liga de Loja, donde incluso destacó a nivel internacional. Este año en cambio fue muy opaco.

Exequiel Benavidez:

Volante central que inexplicablemente llegaba a Liga Deportiva Universitaria cuando no era precisamente la necesidad del club en ese puesto. Fue titular en Copa Libertadores siendo de lo más presentable de aquella actuación para el olvido de la “U”. Sin embargo, en el transcurso de la temporada fue perdiendo los papeles, quitando el frágil equilibrio del mediocampo universitario para transformarlo en un caos del que nunca se recuperó, pese a que rara vez fue tomado en cuenta para alinear en el segundo semestre. También valdría decir que complicaciones físicas conspiraron contra él.

Álex Bolaños:

Volante central que militó este año en Aucas. Bolaños fue un referente del equipo oriental mientras estuvo en primera división y sus actuaciones le permitieron ser convocado a la selección nacional y en este año se le daba la posibilidad de migrar al fútbol brasileño. Sin embargo duró un mes en el Santa Cruz, al “no adaptarse” al medio, desarmando a los orientales y nunca volviendo a ser el mismo. Costó volver a organizar la media cancha de los oro y grana. Básicamente integra esta lista por mostrar tremenda falta de carácter.

Irven Ávila:

El volante peruano llegó a Liga de Quito en el segundo semestre del año como alternativa al deficiente ataque del club albo. En pocos partidos pudo ser titular, aportando mínimamente y siendo relegado primero a la banca para después dejar de ser convocado, apareciendo de nuevo casi al final de la temporada. Casi nada para destacar pese a la expectativa que despertó por ser seleccionado de su país.

Michael J. Quiñónez:

El talentoso volante jugó esta temporada en el Mushuc Runa, pero fiel a lo que ha sido su carrera, su irregularidad fue manifiesta. Partidos buenos, partidos malos, poca consistencia, destellos y siendo cuestionado en su disciplina por el inefable Luis Alfonso Chango, máximo dirigente de su club. Perdió espacio como no podía ser de otra manera y brindó poco a un equipo que parecía reaccionar, pero irremediablemente terminó descendiendo. Otra vez defraudó las expectativas en él fundadas.

Brahian Alemán:

El atacante uruguayo fue el fichaje que más revuelo causó en Liga, el fútbol quiteño y tal vez ecuatoriano. La novela que se generó en torno a su traspaso al club universitario y su buen desempeño con Barcelona en el 2015 hicieron que en él caigan las mayores expectativas de la temporada. En la “U” brindó escasos momentos de buen fútbol, algunas buenas asistencias, pero en general se esperaba que conduzca a un equipo que finalmente defraudó mucho por todo lo que se esperó a inicios de temporada y se lo ubica simbólicamente a Alemán como cabeza de aquella desazón.

Daniel Angulo:

Se mencionó que Liga Deportiva Universitaria tuvo el peor ataque del año, por debajo incluso de los clubes descendidos. Entonces se recurrió al atacante ecuatoriano para paliar esa deficiencia, sin los resultados esperados, pues estuvo decididamente con “el santo de espaldas”, perdiendo lugar entre los convocados al final del año y siendo su paso por la “U” muy poco trascendente.

D.T. Claudio Borghi:

La contratación del estratega argentino era una de las apuestas más ambiciosas de Liga Deportiva Universitaria dado su prestigio. Sin embargo, como prácticamente todo lo que hizo el cuadro albo en este año, la jugada no resultó como se planeó. Borghi es el símbolo de todo lo que le salió mal a los de camiseta blanca en este olvidable 2016 para ellos.

Suplentes: Juan Molina, Ramón Arias, Juan P. Caffa, Marwin Pita, Armando Wila, Daniel Neculman, Carlos Tenorio

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Foto metroecuador.com.ec

Breve enfoque sobre Liga 2016

Costó mucho elaborar este artículo, porque Liga 2016 es un enigma, y al mismo tiempo un reto, siendo que los cambios de estilo suelen tomar tiempo, paciencia, y no siempre son exitosos; pero empezar a jugar distinto toma su tiempo, y la apuesta de reemplazar a Zubeldía con el Bichi Borghi resulta tan atractiva como peligrosa; porque al final de cuentas estamos hablando del equipo subcampeón, aquel al que le faltaron un par de puntos o goles para terminar primero.

Clásicamente se ha sostenido que los equipos se arman de atrás para adelante, es verdad, pero principalmente en el sentido de que, lo más importante es tener un equipo que defienda bien; como el de Zubeldía, y que a partir de esa certeza tenga jugadores, y un esquema, que desequilibren en ofensiva, lo cual nunca terminó encontrando la versión 2015; esa diferencia ofensiva que le permita doblegar al mejor equipo del torneo.

Con Borghi vuelve la línea de tres, seguramente los mediocampistas tendrán preponderancia en el armado del equipo, y se intentará siempre llegar al arco contrario trasladando el balón por abajo; el pelotazo de la era Zubeldía (bien entendido, se lo utilizó como un recurso válido) deberá ir cediendo espacio a asociaciones de pases más dinámicas y profundas; la propuesta de sacar la pelota es tan loable como arriesgada, y en estos pocos minutos que se ha visto al equipo se ha notado que les ha costado considerablemente; lo importante será que el concepto se mantenga y no decaiga ante posibles resultados complicados; solo así podremos saber hasta dónde puede llegar el proyecto.

En el armado del equipo las altas arrancan con Brahian Alemán, la novela del mercado de pases que finalmente llega para darle un salto de calidad a Liga en los últimos tres cuartos de cancha; aguerrido, muy dinámico, buen disparo de media distancia, parece recibir la manija del equipo en ofensiva; mucho dependerá su rendimiento en las asociaciones que pueda hacer con sus compañeros, buena apuesta, debería rendir sin mayor inconveniente.

Llegó también el chileno Edson Puch, seguramente conocido por el entrenador en sus largos pasos por el país araucano, parece ser un volante ofensivo, o segundo delantero, hábil con la pelota, encarador; aporta desequilibrio ofensivo, lo cual anteriormente se encontraba casi en su totalidad bajo la responsabilidad de Cachete Morales; de lo visto hasta acá, al entrenador le agrada la idea de juntar a los talentosos, Alemán, Morales y Puch, inclusive sacrificando presencia de área; primer rasgo significativo que ha mostrado la Liga de Borghi.

borghi puch

Junto a ellos Liga cubrió la salida de Narciso Mina con Carlos Tenorio; jugador cuyo rendimiento resulta una incógnita por su edad, en cualquier caso de hacer goles el que sabe no se olvida, no sorprendería contar con presencias importantes de Carlos durante la campaña, pese a que talvez, su participación no sea tan constante vistas las intenciones iniciales de Borghi, el concepto de llegadores que parece querer implementar el Bichi no coincide con la postura más resolutiva de Carlos, quien preferirá siempre vivir en el área, ahí donde puede marcar aún diferencias.

Llegó también Jairo Padilla, interesante delantero de Aucas, que aporta desborde, velocidad, y que puede resultar un buen proyecto si alcanza a tener continuidad, a diferencia de lo que ocurrió con, por ejemplo, Uchuari; la evolución de Jairo irá directamente atada a los minutos que tenga; aparece también Julio Ayoví, que le sirve al equipo principalmente con la línea de 3; Javier Villalva y la vuelta del hijo pródigo, Luis Bolaños, que si está bien en lo físico sumará seguramente con su cambio de ritmo y gran disparo de media distancia.

La baja más sensible termina siendo la de Jonathan Alvez, que aparentemente no encontró espacio y decidió probar otra suerte; habrá que ver cuanta falta hace, tomando en cuenta que era un recurso interesante para tener, la temporada es larga, inclusive Liga podría fichar un delantero que cubra ese lugar, lo cual al momento no lo ha hecho y no parece ser una prioridad, lo cual resulta coherente con el proceso; especialmente con la movida que se detalla a continuación.

Durante años Liga no ha cubierto ninguna vacante en la zona del medio centro; Obregón, Urrutia, Vera e Hidalgo, a su momento y sucesivamente, han monopolizado ese sector de la cancha con absoluta solvencia; además Hidalgo terminó jugando talvez la mejor temporada de su carrera en 2015, por lo que parecía que no era necesario un refuerzo, tomando en cuenta además la llegada de Edison Vega, y la presencia en el plantel de los jóvenes Intriago y Cevallos; pero en las últimas horas aparece el nombre de Exequiel Benavidez, volante central de la cantera de Boca Juniors que llegaría a sumarse al equipo de Borghi.

Poco se sabe del jugador, más allá de recordar su paso por Boca en donde no se pudo afianzar y una serie de videos en internet, con la absoluta salvedad de que estos no son la fuente más creíble, se debe decir que parece ser un volante central que presiona mucho y roba en base al anticipo y a una interesante lectura del juego, es hábil con la pelota, y apoya mucho a la generación de juego del equipo porque parece tener un buen pie.

En los dos partidos que se ha podido ver a Liga (América de Cali y Delfín), se hizo evidente que faltan muchas cosas; solidez defensiva, precisión de la circulación, falta de desequilibrio ofensivo (el único en no anotar en toda la primera fecha) y varios otros temas que, viéndolos de manera separada pareciera que requieren cada uno una solución, un fichaje que cubra cada carencia; empero considero se debería entender estos problemas desde la idea del entrenador; dónde quiere defender, cómo quiere circular la pelota; y quizás teniendo mayor circulación, mejor calidad de posesión, varios de los problemas se puedan solucionar sin necesidad de recargar el plantel de contrataciones, que a la larga no garantizan nada.

¿La idea es sostener el equipo diez metros más adelante y someter al rival teniendo siempre la pelota? Si es así el fichaje de Benavidez como alternativa parece coherente; ¿será suficiente? Imposible saberlo sin ver los partidos; pese a que el sistema es nuevo varios de los intérpretes son los mismos del año pasado, una base que tiene ya sus años y que estuvo tan cerca de completar una gran temporada 2015; Domínguez, Araujo, Romero, Quinteros, Hidalgo, Cevallos, Morales, Pervis e Intriago llevan varias tardes jugando, la adaptación a sus nuevos compañeros puede tomar su tiempo, pero debería llegar, especialmente porque hay varios jugadores sobresalientes en esa lista, y así siempre es más fácil jugar.

Aparece en el horizonte un grupo bravísimo de la Libertadores, más allá de cómo le vaya a Liga, parece perfecto para que este nuevo proyecto tenga competencia al más alto nivel posible y que eso, si se puede, acelere su adaptación, que parece ser lo que más hace falta.

FyA